Nos destacan la pasada conferencia sobre la E. Nuclear y algo mas...

Moncho Conde Corbal, articulista de La Región, destaca en sus temas del periódico de hoy, la esplendida charla de Luis Herranz, director del Programa de Seguridad Nuclear del CIEMAT, por la rotundidad de sus argumentos, estadísticamente contrastados, y la vitalidad docente de su discurso, que la Asociación organizó el pasado lunes en el Ateneo orensano.

Con esta conferencia con la que iniciamos la puesta en debate ante nuestros conciudadanos de esta problematica tan crucial, sobre la que hay que posicionarse ya practicamente de inmediato, abrimos un ciclo que seguiremos en otoño, contando con expertos que se situen en perspectivas y razones contrarias, y que esperamos poder cerrar con una mesa de contraste de opinión.

Agradecemos sinceramente los ánimos que nos da este periodista, para mantener este objetivo que nos hemos marcado desde la Asociación, para llevar a la sociedad orensana la mayor información objetiva posible sobre los asuntos cotidianos que nos preocupan y rigen, en el orden económico, de convivencia y cultural, siempre en el marco de la mas absoluta libertad, para motivar una ciudadanía con criterio propio y riguroso, como antídoto a tergiversaciones y manipulaciones a las que abrumadora y cotidianamente nos vemos sometidos por todos los frentes .

"...Energía nuclear

Muy interesante la charleta que nos dio el experto en energía nuclear, Luis Herranz, director del Programa de Seguridad Nuclear del CIEMAT, sobre esta materia que mete miedo por recuerdo de infausto accidente de Chernóbil, en gran parte provocado por la ausencia de medidas en materia de seguridad.

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Por otro lado sí hay que aplaudir la inquietud y el esfuerzo de gente que organiza actos como éste, cual es el caso de la Asociación Ciudadana para la Libertad, Progreso y Democracia (demasiado nombre; quizás cautivo aún de cierta experiencia política malograda y sufrida por algunas cabezas significadas de ella, como Ildefonso, Quintáns, Ángeles, Cándido Cid o Lola). Gracias a ellos podemos asistir a debates que no nos cuestan, pues tampoco, de momento, están subvencionados, y ojalá sigan sin estarlo siempre, pues es la forma de permanecer totalmente independientes y libres.

Lo que no me parece de recibo, y lo digo sin ninguna intención dañina (puntualizo para los susceptibles), es que el Ateneo penda sobre un coloquio inconcluso, debido a inusitado interés del público, su espada de horario con punta de cierre de las diez de la noche, cual si fuera oficina de Hacienda o de Entidad financiera. Por lo demás, kilowatios de luz para el debate...."

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